Todos los Martes rezamos por los sacerdotes y las almas consagradas Desde aqui compartiremos nuestros encuentros.. Oh, Jesús, Pastor eterno de las almas, Dadnos muchos y santos sacerdotes y haz de nuestras familias semilleros de vocaciones.
A todos los sacerdotes, transfórmalos en Ti, Señor. Que el Espíritu Santo los posea, y que por ellos renueve la faz de la tierra.
martes, 14 de octubre de 2014
Dios mío, Tú eres mi Padre amoroso que anhelas que experimente la auténtica paz y felicidad al dejarte ser el centro de mi vida interior. Guía mi meditación para que me aleje de las preocupaciones exteriores y pasajeras y pueda ser dócil a tus inspiraciones.
La Santa Sede anunció que el Papa Francisco convocó a una Jornada de Oración por el Sínodo de Obispos sobre la Familia que se realizará del 5 al 19 de octubre en el Vaticano.
Para ello, los obispos invitaron a los fieles a unirse rezando la oración que el Santo Padre preparó con ocasión de la Fiesta de la Sagrada Familia del año pasado.
La oración es la siguiente:
“Jesús, María y José, en ustedes contemplamos el esplendor del amor verdadero, a ustedes nos dirigimos con confianza. Sagrada Familia de Nazaret, haz que también nuestras familias sean lugares de comunión y cenáculos de oración, auténticas escuelas del Evangelio y pequeñas Iglesias domésticas. Sagrada Familia de Nazaret, que nunca más en las familias se vivan experiencias de violencia, cerrazón y división: que todo el que haya sido herido o escandalizado conozca pronto el consuelo y la sanación. Sagrada Familia de Nazaret, que el próximo Sínodo de los Obispos pueda despertar en todos la conciencia del carácter sagrado e inviolable de la familia, su belleza en el proyecto de Dios. Jesús, María y José, escuchen y atiendan nuestra súplica. Amén”.
Dios todopoderoso y eterno, que otorgaste a san Calixto, la gracia de luchar por la fe hasta el martirio; concédenos, por su intercesión, soportar por tu amor todas las adversidades y caminar incansablemente hacia ti, que eres nuestra vida. Por nuestro Señor Jesucristo...
Amén.
† Lectura del santo Evangelio según san Lucas 11, 37-41
Gloria a ti, Señor. En aquel tiempo, un fariseo invitó a Jesús a comer. Jesús fue a su casa y se sentó a la mesa.
El fariseo se extrañó de que Jesús no hubiera cumplido con la ceremonia de lavarse las manos antes de comer. Pero el Señor le dijo:
"Ustedes, los fariseos, limpian por fuera el vaso y el plato, mientras por dentro están llenos de robos y maldades.
¡Insensatos! El que hizo lo de fuera ¿no hizo también lo de dentro? Den limosna de lo de dentro, y entonces quedarán limpios".
Palabra del Señor.
Gloria a ti, Señor Jesús.
salmo 39
Aquí estoy, Señor, para hacer tu voluntad.
Con una gran confianza esperé en el Señor; él se inclinó hacia mí y escuchó mi clamor. El me puso en la boca un canto nuevo, un himno a nuestro Dios.
Aquí estoy, Señor, para hacer tu voluntad.
Sacrificios y ofrendas ya no quieres, en cambio me has dejado oír tu voz; no pides expiaciones ni holocaustos, así que dije: "Aquí estoy".
Aquí estoy, Señor, para hacer tu voluntad.
En el libro sagrado se me ordena cumplir lo que tú mandas. Me agrada hacer tu voluntad, Dios mío, pues tu ley es la entraña de mi entraña.
Aquí estoy, Señor, para hacer tu voluntad.
He dado a conocer tu salvación ante todo tu pueblo; tú bien sabes, Señor, que no guardé silencio.
Aquí estoy, Señor, para hacer tu voluntad.
Glorifiquemos a Cristo, vencedor del pecado y de la muerte, del odio y del egoísmo, y que nos manda amarnos como Él nos ha amado.
-Oh Cristo, que en tu resurrección destruiste el poder del pecado y de la muerte, haz que nosotros venzamos los pecados de la vida diaria.
-Tú que alejaste de nosotros la muerte y nos has dado nueva vida, concédenos caminar alegres y gozosos por la senda de tu vida nueva.
-Tú que hiciste pasar a la humanidad de muerte a vida, haz que trasmitamos a cuantos se relacionen con nosotros la paz y felicidad que nos has dado.
-Tú que alegraste a tu Madre y a tus discípulos con tus apariciones, llénanos de tanto gozo, que redunde en bien de los demás.
Oración:
Te pedimos, Señor Jesucristo, que tu Espíritu haga florecer en nuestras vidas las Bienaventuranzas. Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén.
Seguir a Cristo es comulgar con su obediencia. Por eso, los que se unen a la fraternidad, cuya Regla de vida es el Evangelio, son «recibidos a la obediencia» (2 R 2,11), por la que procuran someterse en todo al Señorío de Dios. Ahora bien, Dios manifiesta su voluntad por intermediarios humanos. De este modo hace a la obediencia crucificante, incluso desconcertante, pero también la salva de las ilusiones. El obediente queda desligado del apego a su propia razón y emplazado para probar el valor de su fidelidad a Dios por la acción: «Y si alguna vez el súbdito ve algo que es mejor y de más provecho para su alma que lo que le manda el prelado, sacrifique lo suyo voluntariamente a Dios y procure, en cambio, poner por obra lo que le manda el prelado. Pues esta es la obediencia caritativa, porque cumple con Dios y con el prójimo» (Adm 3,5-6).
La acción evangélica como se ve tiene, pues, a Dios por fin. De este modo, ella hace al hombre libre, liberado de la tiranía del «qué dirán»: «Y, aunque los tachen de hipócritas, sin embargo, no cesen de obrar bien» (1 R 2,15).
Francisco insiste, finalmente, sobre la prioridad de la acción para los dos componentes «horizontales» de la vida evangélica: el amor fraterno y la misión.
Accion y contemplacion segun los escritos de San Francisco
por Martin Steiner, OFM sitio: franciscanos.org
San Calixto I, papa del año 217 al año 222.
En un tiempo fue esclavo. Después de años de vida agitada e irregular y alcanzada la libertad, fue ordenado diácono por el papa Ceferino, a quien sucedió en la cátedra de Pedro el año 217. En su pontificado se distinguió por su acción pastoral y por la defensa de la fe tradicional: combatió a los herejes adopcionistas y modalistas, e introdujo nuevas normas en la praxis penitencial y en el derecho matrimonial. Por haber mitigado las condiciones exigidas a los apóstatas de la fe para su readmisión en la Iglesia, sufrió la oposición de los rigoristas. Resulta para nosotros ejemplar su difícil y lento itinerario desde la esclavitud, la actividad a veces fraudulenta en el mundo financiero y administrativo, hasta su completa conversión y su entrega a la defensa de la fe y a la acogida de los más débiles. Recibió la corona del martirio el año 222.-
Oración: Escucha, Señor, las súplicas de tu pueblo y concédenos la protección del papa san Calixto, cuyo martirio celebramos llenos de alegría. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario